El número de estudiantes que visitaron la ciudad, produjo un alto impacto turístico y económico. Además, se esperan más de 20 mil alumnos y una importante cifra que supere los 300 millones de pesos. “Los viajes de fin de curso significan producción, trabajo e igualdad de oportunidades”, destacaron desde Provincia.
El Gobierno de la provincia de Buenos Aires reivindicó el movimiento turístico estudiantil, pero destacando el económico, a raíz del programa “Viajes de fin de curso”, el cual trae un gran número de jóvenes a la ciudad costera, y que espera 21 mil estudiantes para los próximos dos meses.
El gobierno provincial de Axel Kicillof, confirmó que el programa “Viajes de Fin de Curso” se encuentra en su segunda edición, y trasladó a El Partido de la Costa, 17.605 estudiantes, pertenecientes a municipios de diversos puntos de todo el territorio bonaerense. La medida apunta principalmente a los alumnos que se encuentran cursando el último año de colegios secundarios, tanto públicos, como privados.
El programa, promocionado y financiado por el Ejecutivo provincial, calcula que, si bien faltan dos meses, esperan terminar el año con 38 mil estudiantes. Un hecho que impactará económicamente de manera local y con un amplio movimiento económico, superando los 320 millones de pesos.
El contingente de estudiantes bonaerense, elige distintos destinos provinciales, y disfrutan de 4 días y 3 noches. Incluyendo gastos de comida, hotelería y transporte, contando con excursiones y visitando espacios deportivos, turísticos, culturales e históricos. Promoviendo e incentivando el vínculo con los paisajes y tradiciones que tiene la provincia de Buenos Aires.
Por su parte, el ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica bonaerense, Augusto Costa detalló los objetivos de este programa, y dijo que “es pura alegría, vemos la felicidad de los estudiantes que terminan el secundario y pueden disfrutar de una experiencia única en la vida, muchos de ellos viajando por primera vez con sus compañeras y compañeros y compartiendo actividades con estudiantes provenientes de otras localidades, conociendo el mar, las sierras y distintos atractivos turísticos de la Provincia”.
“También vemos el enorme impacto que tiene esta política en las agencias de viajes, los hoteles, la gastronomía, el comercio, el transporte y la actividad económica y el empleo en los municipios que reciben a los contingentes”, explicó Costa, y concluyó: “Los viajes de fin de curso significan producción, trabajo e igualdad de oportunidades”.